Te puede pasar a tí
zapeado por zama
Si al enceder la tele, ve a un presentador/a situado frente a una serie de personas anónimas que cuentan cosas sobre su vida personal, está viendo un talk show.
En España el primer talk show de pura cepa que se vio en ámbito nacional fue "El programa de Ana", que como su propio nombre indica, era presentado por Ana (García Lozano). Nunca olvidaré aquellas tardes erráticas de verano (por no definirlas de otra manera más concreta) en las que me aficioné a los chafardeos de gente desconocida.
Me rebota en la cabeza la intervención de una maruja con ganas de figurar y su traje recién comprado en elcortinglés. Contando los problemas de una familia difusa (por no definirla de otra manera más concreta), comentó que su niño estaba yendo al psiquiatra porque de pequeño se había dado un golpe muy fuerte en la cabeza.
Mis risas todavía resuenan en el universo junto al eco del big bang primigenio.
Obviamente, el formato no era nuevo. Ana (García Lozano, la del programa de) lo había hecho ya en Telemadrid y era un calco de los cientos de programas similares que desde hace años, muchos años, existen en EEUU.
Desde entonces ha habido muchos clones de Anas en la parrilla nacional. Alicia Senovilla, Oscar Martínez, Patricia (la del diario de)... todos iguales. Gente desconocida cuenta que su marido le pega, o que se novio le engaña, o que su mujer juega al bingo, o que su amante se ha liado con una prima suya, a la cual ha dejado embarazada de gemelos, pero que está dispuesta a perdonarlo siempre y cuando a la prima no la vuelva a ver. Temas de interés social.
¿Por qué lo hace la gente? Pues a saber, por ganas de salir en la tele, porque necesitan pelas, porque es mucho más barato que un psicólogo (o que un psiquiatra, en el caso de golpes fuertes en la cabeza), porque de verdad se creen que la tele es un servicio público... en fin, la mente humana es compleja y no es este el objetivo del post.
Lo que de verdad me interesa es presentar a los talk show como un enemigo a batir. Y aquí es donde surje Jenny Jones.
Jenny Jones, no confundir con Jimbo Jones (secundario gamberro de Los Simpson, compañero de Nelson y Kerney), era una presentadora de talk show americano ("El show de Jenny Jones", ni en esto Ana, la del programa de, era original).
En su programa, que como todo en EEUU es más bestia de lo que aquí podemos imaginar, dedicaron un día de 1995 a "Estoy colado por alguien muy cercano, él no lo sabe y se lo quiero decir en la tele a nivel nacional". Con estas, llevaron engañado a un tio al que le dijeron que se le iba a declarar una compañera de trabajo. Cuando llegó a plató, con unos cuantos millones de personas viéndole en directo, quien se declaró fue su vecino, obviamente homosexual. Tras ponerse más colorado que un pimiento morrón y exclamar "what a shame", declinó cortesmente a su pretendiente.
Pero dos días después compró una escopeta, fue a su casa y le metió dos tiros en el pecho.
En el posterior juicio, Jenny Jones fue llamada a declarar para ver la responsabilidad del programa en el caso. Y se destaparon prácticas habituales en éste y otros muchos espacios similares: emborrachar a los invitados para que estuvieran más soeces y dispuestos a entrar en discusiones, azuzarles durante las pausas diciéndoles que si no dan más espectáculo no cobran, y otras lindezas.
¿Acaso fue este el punto de inflexión para eliminar los talk shows de parilla? Ni de coña. Jenny Jones aguantó hasta el 2003 y aparecieron más de los que había antes. Quizás tentando a la suerte de que hubiera otro crimen y las audiencias se dispararan.
¿Pretende Antena 3 lo mismo con su execrable "El diario de Patricia"? Porque yo me pongo colorado y siento verguenza ajena cada vez que aparece en mi pantalla. Lo mismo cojo un día, compro una escopeta y le meto un par de tiros a alguien en el pecho. Todo sea por la audiencia.
2 Comments:
¡Ay!, los TalkShows. ¿Cómo los llaman en castellano, "programas de testimonio" o algo así?.
En fin, nadie que conozca entiende cómo alguien está dispuesto a ir a la tele a contar esas cosas que cuentan. Debe ser como los medidores de audiencias: nadie conoce a una familia con audímetro, pero diariamente publican las audiencias de televisión.
Estos programas llenan las parrillas televisivas y todos los días tienen gente dispuesta a contar sus miserias a quien quiera escucharlos. Pura pornografía. ¿Es el horario de tarde (de protección de la infancia se supone) el mejor para poner "El diario de Patricia" o la mismo pero en versión famoseo "A tu lado"?.
Por cierto, Emma Loquesea, presentadora de "A tu lado", ¿no os tiene pinta de actriz porno?
By zaperu, at 1:13 p. m.
Emma García, gracias su capa de maquillaje infinito, me tiene más pinta de muestrario de pinturas de Bricomanía que de actriz porno.
De todas formas, a partir de ahora la miraré con otros ojos.
By zama, at 3:16 p. m.
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